viernes, 24 de julio de 2009

Pos- it que somos horteras

Y conste que sé que "pos-it" está mal escrito, pero lo voy a dejar así. Vengo entre flipada y cabreada de un espectáculo que se llama Soñando a Bécquer. El espectáculo en sí me ha gustado. Probablemente haya ayudado que yo ya iba dispuesta a ver cualquier cosa que me quisieran contar de Bécquer y bueno, al final no ha estado mal. Dejémoslo ahí. Bueno, no, una cosita: ¿por qué siempre hay algún repelente entre el público que se dedica a recitar a la par de los actores? Es que siempre me toca uno de estos detrás. Me pasó cuando fui a ver La vida es sueño y casi le meto el codo en la boca al espontáneo que se puso a hacer de Segismundo. ¡Leches! Que quien más, quien menos, todos nos sabemos lo de "¡Ay, mísero de mí! ¡Ay, infelice!... y los sueños, sueños son". Y hoy, lo mismo. ¡Es que no lo soporto! No hace falta demostrar la vasta cultura de uno, y menos con actores trabajando delante.

Lo que ha motivado esta entrada es otra cosa. Me duele no tener documento gráfico (lo conseguiré, porque pienso volver cámara en mano), pero es que es alucinante. Llevaba yo un tiempo deseando ver la tumba de mi adorado y querido Bécquer. Sin ánimo de parecer una loca (aunque me temo que es tarde) aclararé que en mi adolescencia me enamoré de ese hombre. O de la idea que me hice de él a través de sus versos, no sé. No tiene sentido, pero me da igual. Hay cosas que son inexplicables, pero son. Casi lloré la primera vez que vi el retrato pintado por su hermano en el Museo de Bellas Artes de Sevilla y a veces sigo entrando solo por verlo (por cierto, no sé de quién sería la idea de cambiarlo de sitio, pero la han cagado).

Y ya me estoy liando. El caso es que con la entrada al espectáculo, podías visitar el Panteón de Sevillanos Ilustres, que es donde descansan sus restos y los de su hermano. Y es para no creérselo, pero ¡he pasado de largo de la tumba! Si no llega a ser por mis amigas, no la veo. La lápida está en una zona muy baja, casi pegada al suelo. Aunque viendo lo que la rodeaba no sé cómo he podido pasar de largo. Decenas y decenas de "posit" multicolores con mensajes de todo tipo. Muchos de ellos ñoños y otros tan sentidos como "Llama a casa" o "A ti también te queremos, Valeriano, hombre". Entiendo que den ganas de dejarle unas palabras, pero eso es, para mi gusto, una horterada innecesaria. No sé, ¿la tumba de Bécquer llena de post-its? Vaya por delante mi respeto a todos; me imagino que hay gente que ha dejado su mensajito con un sentimiento sincero, pero es demasiado para mí.

14 comentarios:

  1. ¿¿¿Llama a casa??? No me jodas. ¿Qué sería eso? ¿Una tele-psico-fonía? A mí me llama Becquer y me da un infarto. Y seguro que tendría que pagar yo la llamada, conociendo a los poetas románticos, este tío tiene que estar tieso. "Buenas tardes. Un tal Gustavo Adolfo Becquer le llama a cobro revertido desde el Más Allá. ¿Acepta la llamada?"

    Por lo menos, espero que tuviera la decencia de no llamar a la hora de la siesta, que no sea como los cabrones de Jazztel, que siempre andan fastidiándote en lo mejor del sueño.

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  2. Este mundo ha convertido todo lo respetable en una caricatura de si mismo.

    Por lo menos aquí no estan sacando pasta a la gente de forma vergonzosa (bueno... el vendedor de postIt esperemos que no lo haga queriendo...)

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  3. Una horterada, tú lo has dicho, no me lo puedo creer.

    Y lo de los espontáneos lo he vivido yo en la ópera: empieza la típica aria que todo el mundo conoce y la abuela de al lado a cantarla, tararearla y murmurarla: no puedo con eso, le pego un "chisteo" en toda la oreja mirándola a la cara y se acabó. Debiste hacer lo mismo.
    Besis.

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  4. Jajja si es que la gente se monta unas costumbres de lo más raro.
    Como las paredes de chicle jaja.
    Por lo menos en la obra no te adelantaban lo que iba a pasar, como alguna vez (rara) que otra me ha pasado en el cine, que oyes a uno por detrás diciendo "ya verás ahora qué explosión", y cosas así.

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  5. A veces creo que es mimetismo agudo. La gente se muere por hacer lo mismo que ve que han hecho otros, aunque sea estúpido. Bécquer también fue mi primer poeta.

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  6. "Está más escrito", no: "Está mal escrito" :P

    La gente está fatal. Es la frase que más digo últimamente. Yo no soy ni de las que piden firmas cuando ven a alguien que les gusta. Como para poner un papelorrio en una tumba para quien no lo va a leer...

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  7. Guapi, sorpréndete, porque la genial idea ha sido cursada desde la propia Universidad... les pareció genial homenajear a semejante poeta de esta "original" forma...

    En fin...

    Un beso. Mon

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  8. Jajaja, ya te digo: llamadas desde el más allá. A mí los que me amargan la siesta son los de Movistar, que llevan tres días llamándome. Ya haré una entrada, porque me tienen contenta.

    Lukas, el que venda los post-it, se forra. ¿Caricatura? Sí, desde luego. A mí me ha parecido una horterada, sinceramente.


    Peri, es que son odiosos. No los aguanto. Hay que ser un triste para ir recitando en voz alta un texto que se está representando en tus narices. El que quiera actuar, que se suba al escenario y deje a los del patio de butacas tranquilos.

    Besitos, Peri.

    ¡Ufff, Efter! Un día me tuve que cambiar de sitio en el cine por eso precisamente. Y era un matrimonio mayor, vamos, que no eran dos niñatos con ganas de fastidiar. Lo de las paredes de chicle, ¿qué quieres que te diga? Un poco asquerosito para mi gusto.

    Un abrazo, artista.

    Luc, me alegro de que coincidamos, aunque me temo que Bécquer es el primer poeta de media España. Pero bueno, es un buen comienzo, ¿no?

    Los viajes, yo he de reocnocer que me pirra un autógrafo (no de todo el mundo, evidentemente) y una foto. Pero ensuciar así la tumba de un escritor que no va a leer eso porque bien finado está... No sé, no le veo el sentido.

    ¡Mon! ¿De la Universidad? No me lo puedo creer. Cómo está la cosa.

    Un beso, guapa.

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  9. A mí me parece una horterada original. Es algo tan paleto como echar monedas a fuentes (famosas o desconocidas), poner flores en lugares en los que ha muerto alguien (conocido o desconocido), llevar pantalones de esos que muestran el calzoncillo o el tanga, poner música en el móvil sin los auriculares, beber para emborracharse, embalarse con el coche en una rotonda para derrapar…

    Creo que, de todas la paletadas que he enumerado, la de poner post-its en una tumba es de lo más discreto.

    ¡VIVAN LAS PALETADAS!

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  10. Eso merece un testimonio gráfico!!!

    Por cierto, en el DRAE sale pósit.

    (¿y los que cantan ópera mientras la ven?)

    Besos.

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  11. Meteorismo, yo tengo una vena paleta desarrollada, pero esto no termino de verlo, no.

    Landa, estoy en ello. Saqué una foto con mi móvil, pero no encuentro el dispositivo bluetooth en mi ordenador, así que le e mandado la foto a mi hermano para que la pase a su ordenador y me la mandará por correo. A ver si mañana la tengo porque esto es para verlo. Lo de la ópera es para coger a la gorda y tirársela encima.
    Y lo del DRAE tenía que haberlo mirado, sí, que son ellos la mar de apañados españolizando todo lo que se cruza en su camino. Incluido el güisqui.

    Un beso grande, Landa.

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  12. Comprensible que te pases por el museo cada que tienes oportunidad. Es un lindo hombre.
    Por otro lado. Los humanos somos así. Unos mas que otros. Pero agradece que no les ha dado por graffitear el área. Que como quiera los "pos-its" hasta con el aire vuelan y supongo que eso de los mensajitos se renueva en cada visita.

    Apapachos y sonrisas

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  13. Imagino que sí, Piel de Letras, que los irán renovando, porque había muchísimos. Lo de los graffitis ya habría sido para morirse.

    Apapachos :)

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