domingo, 24 de octubre de 2010

Segundas partes

Nunca fueron buenas, dicen. Espero que no sea así. Yo vuelvo con la intención de tomarme esto de forma más relajada. Al acotar el nuevo blog a mis anécdotas como docente y poco más, me sentiré menos presionada.

Como veréis, he rescatado algunas entradas de mi antiguo blog e iré incluyendo otras, aunque puede que tarde porque mi nuevo centro es, en líneas generales, un balsa de aceite. Seguro que en cuanto corrija los primeros exámenes hay algo jugoso que colgar.

Bienvenidos. De nuevo.